Saturday, June 11, 2005

Se me escapa el mundo de mi sangre. Se me resbala y se tiende hacia tus sonidos irreconciliables de tus susurros que parecen intocable sueños que extraño con mis entrañas; y son interminables los vacíos que tus sonrisas y tus ternuras me envuelven en tu ausencia, y no puedo respirar y tomo bocanadas grandes de aire, y aun así, el amor se me escapa por los poros, y la muerte entra y derrumba mi puerta, la patea abajo, como si no existieras, y no es así, mi amor existe, lo único es que esta en recónditos lugares, y yo sin ella me desangro poco a poco, se me cuela por una rajadura de mi alma la tristeza, y mi vida no regresa, y yo me defiendo hasta con los dientes, y respiro hondo y sigo respirando despacio y con calma pero !que va! no puedo hacer nada, yo sin ella estoy muerto, y cuando la extraño simplemente muero de nuevo.

Santiago Omied